Nadal fue su perseguidor durante 160 semanas consecutivas en ese lapso de tiempo desde el 25 de julio de 2005 hasta el 17 de agosto de 2008, así Nadal se convirtió en el nuevo monarca del tenis mundial, posición en la que se mantendría durante 46 semanas consecutivas. Nadal se caracteriza por tener una actitud fría en fente de los errores, y es el único tenista en no romper raquetas por frustraciones en pleno partido, por lo que se le reconoce en tener control ante sus emociones en los momentos mas duros.