Rafa logró ganar el duelo con admirable tenacidad por 3-6, 6-4 y 6-4. Este partido también demostró que Nadal aún está lejos de su mejor nivel; sin embargo, su espíritu de lucha de antaño se mantenía intacto. Después de una semana de descanso, Nadal juega el Abierto Mexicano TELCEL en Acapulco sobre arcilla siendo el sembrado N.º 2. Después de victorias sencillas sobre los argentinos Diego Schwartzman, Martin Alund y Leonardo Mayer, en semifinales venció a su compatriota Nicolás Almagro por un apretado 7-5 y 6-4. En la final le esperaba otro compatriota, David Ferrer, tres veces campeón defensor y n.º 4 ATP, siendo este su primer enfrentamiento contra un top 10 desde la final de Roland Garros 2012 con Novak Djokovic, en una prueba para ver su nivel actual, Rafa demostró estar devuelta y apabulló a Ferrer por un contundente 6-0 y 6-2 en solo 65 minutos para ganar el 52.° título de su carrera y 38 en tierra batida.