Rivaldo comenzó su carrera a los 16 años, cuando fichó por el Paulistano en 1989. Sin embargo, los técnicos del equipo pernambucano pensaron que era demasiado débil para el fútbol profesional debido a su físico endeble. Este nuevo crecimiento del fútbol motivó que la FIFA confirmara el 28 de mayo de 1928 en Ámsterdam la realización de un campeonato mundial de selecciones, cuya sede sería confirmada el 18 de mayo de 1929 en el congreso de Barcelona.